“El Plan de Iguala es un ejemplo de que en la diversidad, entre el pasado y el presente, puede haber un punto de encuentro donde los pueblos sean libres y las sociedades más justas”, señaló el Jefe de Estado.
Afirmó que “no es un sueño pensar en una América Latina integrada, unida, que
luche en conjunto para sacar de la pobreza y la marginalidad a los millones de
compatriotas de la patria grande que están sumidos en ese lugar”.
Fue al hablar en la ceremonia que tuvo lugar en el Cerro del Tehuehue, en la
ciudad de Iguala de la Independencia, estado de Guerrero, en la que también se
recordó la creación de la Bandera Nacional y la constitución del primer
ejército, el Trigarante.
Fernández señaló que quienes lucharon por las independencias de ambas naciones
fueron “hombres y mujeres capaces de enfrentar al pasado que quería sostenerse
y construir un futuro que nuestro continente reclamaba”.
“La disyuntiva de hoy no parece ser distinta, seguimos discutiendo entre los
que quieren sostener el orden establecido y los que queremos un sistema
distinto”, reflexionó Fernández.
“Cuando el desánimo aparece tenemos que encontrar en los San Martín, en los
Belgrano, en los Güemes, en Juana Azurduy, en Bolívar, en Guerrero, en Hidalgo,
los nombres que nos den la fuerza para poder volvernos a poner de pie y
recuperar la lógica de preocuparnos por los más humildes, por los que menos
tienen y fortalecer una igualdad que en América latina no existe”, afirmó.
Por su parte, López Obrador, quien estuvo acompañado por su esposa Beatriz
Gutiérrez Müller, agradeció la presencia de Alberto Fernández y destacó que “no
nos pueden quitar nunca el derecho a la esperanza cuando existe sincera
voluntad política y verdadero amor al prójimo, cuando se le tiene amor al
pueblo”.
“México y Argentina son naciones hermanas. Nuestros pueblos han luchado siempre
por la libertad, la justicia y la democracia y por la defensa de la soberanía y
en no pocas ocasiones esas luchas se han entrelazado”, el presidente mexicano y
recordó que hace 45 años la dictadura militar “provocó un éxodo de argentinos
que residieron en este país, cosa que nos llena de orgullo, la condición de
asilados y que enriquecieron nuestra cultura, la academia, las ciencias y las
artes y otras dimensiones de México”.
También estuvieron presentes los ministros de Relaciones Exteriores, Comercio
Internacional y Culto, Felipe Solá; y de Economía, Martín Guzmán; la vicejefa
de Gabinete, Cecilia Todesca; los secretarios General de la Presidencia, Julio
Vitobello; de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz; y de Comunicación y Prensa,
Juan Pablo Biondi; el embajador argentino en México, Carlos Tomada; el diputado
nacional Carlos Selva y el asesor presidencial Ricardo Forster.
Luego de que López Obrador izara la bandera en el asta monumental ubicado en el
cerro, hicieron uso de la palabra el gobernador del Estado de Guerrero, Héctor
Astudillo Flores, y el director general del Instituto Nacional de Antropología
e Historia, Diego Prieto Hernández.
El denominado Plan de Iguala fue un documento de carácter político, proclamado
por el militar Agustín de Iturbide, que se dio en el contexto del proceso de la
independencia mexicana y que básicamente proponía dar por terminada la guerra
entre México y España, que fue aceptado por el principal militar insurgente,
Vicente Guerrero.