En ese sentido, el secretario de Salud, Enrique Rifourcat, explicó: “El contagio se puede dar al inhalar el aire contaminado en lugares donde los roedores infectados desprendieron el virus, ya que, al secarse, las partículas de heces y orina se combinan con el polvo y se transportan en el aire”, y remarcó que “el virus también se puede transmitir por mordeduras o contacto directo con el roedor, vivo o muerto”.
De esta manera, para evitar el contagio, desde el área de Salud municipal se recomienda mantener la casa limpia, sellar rendijas de más de 0,5 cm en el interior y exterior de la vivienda, dejar la basura bien cerrada y en envases resistentes, mantener el pasto corto, no dejar recipientes con agua ni alimentos de mascotas al alcance de roedores, y evitar colocar leña o hacer huertas a menos de 30 metros del hogar.
A su vez, para las zonas rurales se aconsejó ventilar por 30 minutos antes de ingresar a lugares cerrados. Después de ventilar, rociar el suelo y superficies con agua y lavandina; mantener los alimentos y el agua fuera del alcance de roedores, sellar y desratizar galpones y bodegas, al tiempo que estas últimas deben ser ventiladas, ordenadas a diario y libres de materiales de desecho.
Por otro lado, quienes se alojen en campings deberán usar carpa con piso, cierre y sin agujeros; elegir preferentemente lugares limpios y libres de matorrales y pastizales; mantener la basura en recipientes cerrados (si es necesario, enterrarla); beber sólo agua segura (potable, hervida, envasada o desinfectada); guardar alimentos en envases resistentes y cerrados; no recolectar ni consumir frutos silvestres; no dejar ollas ni utensilios al alcance de roedores; y caminar sólo por senderos habilitados.
En relación a la aparición y/o manipulación de roedores muertos, especialistas de la Municipalidad explicaron que “hay que utilizar mascarilla y guantes, rociarlos con lavandina, dejar actuar durante 30 minutos, introducirlos en una bolsa y enterrarlos a 50 cm de profundidad”.
Con respecto a los síntomas del Hantavirus, Rifourcat señaló: “Se asemejan a un estado gripal, con presencia de fiebre; dolores musculares y de cabeza; náuseas; escalofríos; vómitos; diarrea; y, en algunos casos, dolor abdominal o en la parte baja de la columna vertebral”; mientras que precisó: “Después de algunos días, pueden presentarse dificultades respiratorias que se verán agravadas por lo que se conoce como Síndrome Cardiopulmonar por Hantavirus, un estado poco frecuente pero que puede llevar a la muerte si no es tratado en lo inmediato”.
Ante casos de síntomas febriles, se recomienda:
o Consultar al médico
o Cumplir con el reposo indicado y evitar asistir a lugar públicos
o Si tiene que salir del domicilio, hacerlo utilizando barbijo
o Evitar el contacto estrecho con sus convivientes
o Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón
o Ventilar todos los ambientes de la vivienda
o Realizar la limpieza de hogar con solución de lavandina.
